El mundo laboral en Costa Rica ha experimentado transformaciones significativas en los últimos años, impulsadas en gran parte por la pandemia y las nuevas demandas del mercado. Mientras algunas empresas apuestan por modelos de trabajo más flexibles, otras han optado por un regreso al formato tradicional con más tiempo en las oficinas. No obstante, una tendencia se destaca claramente: el modelo híbrido, que combina días de trabajo remoto con otros en la oficina.
Según un estudio realizado por la Coalición Costarricense de Iniciativas de Desarrollo (CINDE), el 79% de las multinacionales en el país ya implementa un esquema híbrido. Esta modalidad ha ganado popularidad debido a su capacidad para adaptarse a las necesidades tanto de empleadores como de empleados, quienes buscan una mayor flexibilidad sin perder el contacto directo con la empresa.
La implementación del modelo híbrido
El modelo híbrido ha demostrado ser una solución efectiva para muchas empresas costarricenses, ya que permite a los trabajadores disfrutar de la comodidad del teletrabajo algunos días a la semana, mientras siguen manteniendo la interacción personal y la conexión con sus equipos en la oficina. Según el estudio de CINDE, más del 50% de las empresas encuestadas han tenido que realizar modificaciones físicas en sus oficinas para adaptarse a esta nueva modalidad, lo que incluye rediseños de espacios y la implementación de tecnología avanzada para mejorar la experiencia laboral. Estos cambios buscan no solo facilitar el trabajo híbrido, sino también generar un ambiente laboral que promueva el bienestar de los colaboradores.
Andrea Centeno, directora de Comunicación y Mercadeo de CINDE, explicó que estas adaptaciones están dirigidas a crear zonas especializadas dentro de las oficinas, que permitan a los empleados contar con áreas cómodas y funcionales para desempeñar sus tareas de manera más eficiente. Este enfoque también apunta a fortalecer la cultura organizacional, facilitando la colaboración entre equipos y mejorando la productividad.
La preferencia por los días remotos
El estudio reveló detalles sobre cómo las empresas están organizando sus modelos híbridos. El formato más común consiste en tres días de teletrabajo por semana, con un 28% de las empresas que implementan este esquema. En segundo lugar, el 18% de las organizaciones permite dos días remotos, mientras que el 14% ofrece la opción de más de cinco días de trabajo a distancia. Aunque aún existen empresas que mantienen el trabajo 100% presencial (9%) o totalmente remoto (12%), la mayoría se inclina hacia la modalidad híbrida.
Los motivos detrás de esta preferencia son variados. Uno de los factores más mencionados por los empleadores es la necesidad de adaptarse a las condiciones actuales del país, como las constantes obras de construcción en las vías nacionales. Además, los empleadores reconocen que el teletrabajo mejora la calidad de vida de los empleados, reduce los tiempos de desplazamiento y aumenta la productividad al ofrecer mayor autonomía para gestionar el tiempo.
El regreso a la oficina y los beneficios del modelo híbrido
Aunque la tendencia hacia el trabajo remoto sigue siendo fuerte, también hay un resurgimiento del trabajo presencial, especialmente en sectores como las ciencias de la vida y la manufactura. Sin embargo, las empresas de servicios son las que más han adoptado el modelo híbrido, aprovechando las ventajas que ofrece el teletrabajo en términos de flexibilidad y ahorro de costos operativos.
Ronald Gutiérrez, abogado de la firma BDS, destacó que conceptos como el «smart working» y el «trabajo por objetivos» están ganando terreno. Estos enfoques permiten a los trabajadores cumplir con sus responsabilidades sin necesidad de estar en la oficina durante un horario fijo, enfocándose en los resultados y no en la presencia física. Este cambio de mentalidad ha permitido a las empresas optimizar los recursos y a los empleados gestionar su tiempo de manera más eficiente, lo que lleva a un ambiente laboral más saludable y productivo.
Desafíos y oportunidades
El modelo híbrido no está exento de desafíos. La falta de interacción física en algunos casos puede dificultar la comunicación entre los equipos, lo que podría afectar la cohesión organizacional. Además, algunas empresas deben enfrentarse a la dificultad de garantizar que los empleados se mantengan productivos y comprometidos con la empresa, aun cuando trabajan desde casa.
Sin embargo, el modelo híbrido también presenta oportunidades para las organizaciones que están dispuestas a adaptarse a los cambios. Ofrecer flexibilidad laboral puede ayudar a atraer y retener talento, especialmente entre las generaciones más jóvenes, que valoran la posibilidad de equilibrar su vida personal y profesional. Además, la implementación de nuevas tecnologías y el rediseño de los espacios de trabajo son pasos importantes para fomentar una cultura laboral inclusiva y moderna.
El panorama laboral en Costa Rica está en constante evolución, y el modelo híbrido ha emergido como una de las soluciones más populares para adaptarse a las nuevas necesidades del mercado. Aunque las empresas han adoptado diversas modalidades de trabajo, la flexibilidad que ofrece el modelo híbrido parece ser la clave para mejorar la productividad, el bienestar de los empleados y la eficiencia organizacional. A medida que el país continúa adaptándose a los cambios tecnológicos y sociales, el trabajo híbrido probablemente seguirá siendo una tendencia dominante en los próximos años, ofreciendo una combinación de los beneficios del trabajo remoto con las ventajas del contacto presencial en la oficina.